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Adultos mayores: cuidados necesarios durante el verano

Una de los grupos más vulnerables a las altas temperaturas del verano son los adultos mayores. Por eso, es importante reforzar algunos cuidados, sobre todo en la piel, ojos y pies para proteger su salud.

Además de los niños y gestantes, es la población de la tercera edad la que puede verse más afectada ante las temperaturas extremas que cada día siguen en aumento en distintas regiones de nuestro país. En Lima, por ejemplo, estamos alcanzando picos de más de 30°C, mientras que en Piura máximas de 34°C.

Si bien grandes y pequeños debemos protegernos del sol, las personas mayores son mucho más sensibles. Para evitar que sufran de fatiga, deshidratación o golpes de calor, es fundamental seguir algunas recomendaciones que nos ayudarán a mantenerlos protegidos durante este verano.

Cuidados de la piel

Aunque el cuidado de la piel de un adulto mayor debe mantenerse a lo largo de todo el año, es durante esta temporada en donde deben ser mucho más minucioso. El sol repercute de manera directa en la dermatoporosis, una condición que se caracteriza por la fragilidad cutánea que genera el envejecimiento de la piel.

En tal sentido, lo aconsejable es que los adultos mayores eviten la exposición solar ente las 10:00 a 5:00 p.m. Igualmente, en caso salgan al aire libre, no deben olvidar aplicar el protector solar con un factor de protección alto (FPS 50+). A su vez, deben vestir siempre ropa cómoda, holgada, de colores claros y de algodón. Y para proteger ojos y cabeza, lentes de sol y sombrero de ala ancha.

Cuidados de los pies

En esta temporada también es necesario incrementar el cuidado de los pies en adultos mayores para evitar distintos problemas ocasionados por el calor, uso de calzado incorrecto, sudoración excesiva de los pies y, principalmente, una higiene inadecuada.

Luego del aseo–especialmente durante la noche-, no olvides secar los pies adecuadamente con una toalla suave e hidratar la planta con cremas indicadas para ello. “En esta época del año, los pies empiezan a resecarse, sobre todo en la parte del dorso. Para evitar la insolación en esa zona, hay que mantenerlos bien humectados”, comenta la dermatóloga Giuliana Nieto, de la Red de EsSalud.

Además, evita que compartan calzado o toallas con otros miembros de la familia para evitar infecciones fúngicas y que caminen descalzos en superficies calientes, pues contribuyen a la formación de queratosis (capas de piel engrosada) y aumentan el riesgo de infecciones.

Cuidados de los ojos

Las personas mayores también son más propensas a sufrir de enfermedades oculares. Hay que considerar que además del sol, el calor seco, así como el uso de aire acondicionado pueden ser perjudiciales para su vista, produciendo sequedad ocular. Para evitar estos y otros problemas en los ojos durante el verano es necesario usar unas buenas gafas de sol. Asimismo, utilizar gorros o sombreros y no mirar directamente al sol. De igual manera, para no presentar irritaciones, el lavado de manos y ojos debe ser frecuente.

Finalmente, añade Pedro Fumachi, médico geriatra del Hospital María Auxiliadora, no debemos olvidar que los adultos mayores suelen consumir poca agua y es necesario promover una buena hidratación en todo momento, además de aumentar el consumo de verduras variadas.

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