Una de cada seis personas ha tenido problemas de infertilidad en algún momento de su vida, revela un reciente informe de la OMS. En esa misma línea, el Centro Nacional de Información biotecnológica de Estados Unidos revela que, además del estilo de vida, las condiciones sociodemográficas y psicosociales; existe una interconexión entre los factores dietéticos y la posibilidad de concebir.
“La calidad, variedad y equilibrio en la alimentación influyen en la salud hormonal al contribuir con una correcta ovulación y potenciar la calidad del óvulo y espermatozoide”, explica Alexandra Márquez, nutricionista del Instituto de Salud Integrativa (ISI). Además, añade la especialista, el consumo de ciertos alimentos pueden contribuir en la prevención y tratamiento de ciertas enfermedades o condiciones que suelen reducir la fertilidad. Algunas de estas son el síndrome de ovario poliquístico, resistencia a la insulina, irregularidades menstruales, entre otras.
Una dieta adecuada para la salud reproductiva
Teniendo en cuenta la importancia de una dieta equilibrada, la nutricionista de ISI comparte algunos alimentos que te ayudarán a mejorar tu fertilidad:
- Frutos de diversos colores: fresas, mango, uvas, mandarinas
- Verduras: deben ser variadas y consumirse al menos 2 tazas al día
- Grasas omega 3: pescados como sardinas, salmón, linaza
- Grasas saludables: palta, aceite de oliva, nueces
- Proteínas: pollo, pavo, huevos
- Carbohidratos completos: menestras, quinua, tubérculos
Por otro lado, Anet Arias, ginecóloga y especialista en fertilidad, agrega que, si bien existe un debate sobre la eficacia de los suplementos dietéticos para mejorar la tasa de embarazo, se sabe que algunas deficiencias de nutrientes pueden causar problemas de fertilidad. “El ácido fólico, por ejemplo, no solo previene defectos de nacimiento, sino también mantiene el éxito del embarazo”, comparte. No obstante, aconseja que antes de comenzar con cualquier tipo de suplementación es necesaria la evaluación de un médico especialista.
Del mismo modo, Márquez enfatiza en que, así como existen alimentos que beneficiarán la capacidad reproductiva, también están aquellos que deben evitarse. Algunos son:
- Azúcares refinados: golosinas
- Gaseosas o refrescos industriales
- Pescados grandes como el pez espada (presencia de mercurio)
- Carnes procesadas: embutidos
- Productos ultraprocesados
- Bebidas alcohólicas y tabaco
- Exceso de cafeína
Finalmente, anota, Arias, hay que tener en cuenta que la alimentación saludable debe complementarse con otros hábitos que influyen positivamente en la fertilidad. “Mantener un peso saludable es crucial, ya que tanto el sobrepeso como el bajo peso pueden inhibir la ovulación normal”, detalla. Asimismo, otros factores determinantes incluyen priorizar el sueño, evitar el estrés excesivo y realizar actividad física.