Según la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar (ENDES), solo al 2021, 50.8% de personas mayores a 60 años tuvieron alto riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares. En ese sentido, se sabe que una de las más frecuentes en nuestro país, además del ataque al corazón, infarto de miocardio e hipertensión, es sin duda la arritmia.
Precisamente, de acuerdo con datos de EsSalud, es importante tener en cuenta que la población masculina arriba de los 40 años, es la más propensa a presentar arritmias cardíacas. De hecho, refieren, durante 2022, solo el hospital Guillermo Almenara atendió a más de 400 personas con esta patología.
Atención al corazón
La arritmia se define como una alteración del ritmo cardiaco. “Los latidos del corazón ocurren como consecuencia de impulsos eléctricos que hacen que las aurículas y los ventrículos se contraigan de forma adecuada, sincrónica y rítmica. Cuando el impulso eléctrico no se genera adecuadamente o bien se origina en un sitio erróneo o los caminos para la conducción eléctrica están alterados, se producen las arritmias”, señala los especialistas de la Fundación Española del Corazón.
A su vez, sostiene Hael Fernández Prado, cardiólogo electrofisiólogo del hospital nacional Almenara, la arritmia puede dar la sensación de aleteo o de corazón acelerado que pueden parecer inofensivos. Sin embargo, “algunas de estas (arritmias) pueden provocar signos y síntomas molestos que ponen en riesgo la vida, por ejemplo, su asociación con desmayos y falta de aire”, enfatiza.
Prevenir, la mejor medicina
La Sociedad Española de Cardiología revela que algunas de las principales condiciones que pueden provocar una arritmia son la hipertensión y la insuficiencia cardiaca. Por ello, es fundamental mantener bajo control todos aquellos factores de riesgo cardiovascular que las provocan. Esto significa adquirir hábitos saludables que incluyan una alimentación balanceada, hacer ejercicio con regularidad y evitar beber y fumar.
Finalmente, anota Fernández Prado, existe un tratamiento conocido como ablación, el cual es capaz de localizar las arritmias que se ubican en distintas partes del corazón y curarlas de forma definitiva. “La estancia hospitalaria suele ser muy corta, muchas veces menor a las 24 horas”, explica el médico sobre el procedimiento.
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